La Masonería es una institución universal, iniciática y filantrópica, esencialmente filosófica y progresista, que tiene por objeto la investigación de la verdad, el estudio y practica de la moral, la virtud y la solidaridad. Trabaja por el mejoramiento espiritual y material de la humanidad y por su perfeccionamiento individual y social. Tiene por principio la tolerancia mutua, el respeto a los demás y a si mismo y la libertad absoluta de conciencia.
La Masonería es un sistema peculiar de moralidad, velado por alegorías e ilustrado por símbolos, en la búsqueda de una realidad que no se descubre inmediatamente sino a través de la observación, meditación y paciencia. La Masonería no tiene el propósito de convertir, ni de arrastrar, ni de contener.
La Masonería acepta entre sus miembros a personas de toda creencia religiosa o política, sin imponer una visión divina, para lo cual crea el concepto simbólico del Gran Arquitecto del Universo, cuyo fin es que simbólicamente responda a la particular visión de Dios o de la creación que tenga cualquiera de sus miembros.
Sí. Lo mismo que un judío, un católico, musulmán, budista o que adore a todos los dioses del Olimpo. En la Masonería, y concretamente en nuestra Logia, no nos interesan sus creencias religiosas, pero sí y prioritariamente, el qué hace y como se comporta en sociedad, con su familia y con sus amigos.
En un mundo como en el que vivimos donde se imponen los fanatismos, la intolerancia y la imprudencia y la injusticia, en el que millones de personas viven en condiciones inaceptables de vida, la Masonería ofrece, igual que lo hizo en el pasado, una opción de cambio a través de sus fundamentos y símbolos de carácter universal, para no permanecer indiferentes ante lo que lo que sucede cada día. La Masonería nos invita a reflexionar y actuar como nos dicta nuestra razón, respetando los principios de convivencia y respeto a todo lo que nos rodea a través de la fraternidad.
La Masonería se organiza en Logias y Grandes Logias (unión de varias Logias). Una Logia es una agrupación de masones. Antiguamente, cuando los masones eran canteros operativos, se reunían, a pie de obra, en un local denominado Logia que quedaba al lado de las construcciones.
No. Lo somos tanto como cualquier grupo de personas que se reúnen para acordar unos fines lícitos, y en la que a sus reuniones no entran todos los que pasan por la puerta. Eso hacen los claustros de profesores, las comunidades de vecinos, los consejos de administración, y tantas y tantas personas que tiene afinidades y proyectos comunes. La Masonería es una institución discreta, no se oculta nada, pero tampoco anda divulgando activamente lo que ocurre al interior de las puertas del Templo.
Para formar parte de nuestra Respetable Logia Simbólica Upuaut Nº9 se requiere ser varón, tener la mayoría de edad, además de no pertenecer ni haber pertenecido a organizaciones que promuevan ideas xenófobas ni tendenciosas o favorables a la discriminación de las personas por razón de sus ideas filosóficas, políticas o religiosas, o por su orientación sexual. Se pide también ser una persona libre e independiente y con un comportamiento social digno; ser tolerante y respetuoso con los demás y consigo mismo, además de tener medios de subsistencia honrados y suficientes.
Existen diferentes maneras de entrar en contacto con nuestra Logia. Una de ellas es que un masón le presente o recomiende su entrada en la Logia. La otra manera es a través de Internet, solicitando información o directamente su admisión a través de nuestra pagina web enviando una petición de ingreso.